jueves, 26 de julio de 2012

Cambiando roms





He tardado en atreverme , pero al fin me he decidido a hacerlo, y ha sido sobre todo por la insaciable curiosidad que me producía. Me refiero a cambiar la rom, que es más o menos una especie de variante o subsistema de android, perfectamente válido frente a las versiones oficiales que nos ofrecen los fabricantes y las operadoras. Quizá me decidí a dar el paso, por que ya llevaba demasiado tiempo con la rom oficial de mi Lg Optimus Me, un smartphone pequeñín y baratito, que era lo que yo buscaba, que si bien su sistema e interfaz es estéticamente vistosa, con el tiempo y con el uso, ha ido perdiendo fluidez y ralentizandose notablemente, de tal manera que mi teléfono, en lugar de Android, parecía ya un Windows.

El primer paso fue hacerle root, que viene a ser a dar permisos de superusuario, una buena forma de aprender a trastear en el software del teléfono, accediendo a funciones que hasta el momento nos estaban vetadas. Conseguir hacerle root, fue lo más costoso en cuanto a emplear tiempo, a base de indagar y buscar por ahi alguna forma de ello.

También es aconsejable, o más que aconsejable instalarle un recovery, esto es, encender el teléfono mediante una combinación de teclas, para acceder a un menú especial, en el que desde allí, se puede instalar cualquier cosa, imágenes de inicio, otros recovery, roms, etc.. Suerte de la página web Xda, a través de la cual me pude orientar, ya que proporciona toda la información, y gran parte del software.

Una vez hecho, tras unos instantes de titubeo, me decidí a lanzarme a la piscina, incluso con el negro precedente de un año atrás, cuando intenté hacer eso mismo, pero a través del pc, y algo debí hacer mal, pues el telefono se me brickeó, lo que quiere decir que se me quedó inutilizado, menos mal que con la garantía vigente,  en el servicio técnico me lo pudieron resucitar. Ese negro precedente era lo que me echaba para atrás, pero una vez hecho, y esta vez sin meter la pata, me alegro de lo decidido, pues con el cambio no sólamente parece como si tuviera un telefono nuevo, con todas las funcionalidades de fábrica, y alguna más añadida, sino que ha ganado en eficiencia, y en ahorro de batería, que era una de las cosas que me incomodaban, pues con la rom oficial la bateria apenas duraba un día.

He tardado, si, pero ahora que me he asomado al interesante mundo de las rom modificadas, no será la ultima vez que la cambie, ahora que he aprendido de mis pequeños errores técnicos. Y recordando que he mencionado el tema en alguna ocasión, no es que los otros sistemas, como el Iphone, me parezcan malos, pero yo buscaba un precio asequible, a la vez que la posibilidad de introducir cambios, posibilidades que Android proporciona, pues resulta que esto es lo mejor de lo que me parece el sistema operativo móvil más versatil y adaptable a cada uno, el poder moldearlo a tus propias necesidades.

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